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Carta desde el desierto


Love is not a victory march
It´s a cold and it´s a broken hallelujah
Rufus Wainwright




La gente necesita algo más que las bondades del hedonismo, necesita cause para navegar y no envejecer estancado ¿Qué puede producir movimiento en la voluntad del hombre? ¿Qué clase de movimiento? Escuché hace unos días que no se trata de “bueno” o “malo”, es acerca de consecuencias; para mi es lo mismo. 

Necesito un cause, que es acto, desplazamiento del Espíritu hacia los otros. Contra-puesta al río de agua viva, la voluntad. Escuché de un hombre llamado David, de corazón excepcional, que hizo música para traer paz al espíritu intranquilo; él uso su libertad para complacerse, luego se arrepintió.

El arrepentimiento es más que sentirse mal, no es un camino ni ritmo; es como en la música una enmienda, es corregir y subsanar cuando aún es posible. Despreciarlo es dar un paso hacia la supresión de la empatía ¿cómo poder amar si no te enteras del otro?, ¿cómo te enteras del reino?

Volver a empezar se escucha muy bien cuando llegas a un departamento amueblado, pero cuando has de masacrar, reconstruir y volver a nacer… bueno, hay que ser muy valiente, pero sobre todo confiar; nunca ciegamente, sino con plena certeza de los relatos acerca del poderoso de Israel. 

Certeza que viene las bendiciones que he recibido, bendiciones que acá en el desierto se extrañan, que en la tierra ajena se ruegan. 40 años dando vueltas para tener el valor de tomar lo prometido, 40 días en el desierto para ser probado, 40 días para respirar, ¿40 años drogado de oxigeno?

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